Gustavo Petro: “América Latina debe ser un espacio sin presos políticos”

Gustavo Petro, presidente de Colombia, volvió a poner el dedo en la llaga sobre la crisis sociopolítica de Nicaragua, al publicar un trino en Twitter en el que expresa solidaridad con los 94 nicaragüenses a los que Daniel Ortega les quitó la nacionalidad, por considerarlos “golpistas”.

La publicación del mandatario es directa y frontal sobre la situación de los presos políticos de Daniel Ortega y Rosario Murillo.

“Reitero, América Latina debe ser un espacio sin presos políticos y sin presos sociales. Toda violación a los derechos humanos debe ser condenada por toda la comunidad internacional. Mi solidaridad con los 94 nicaragüenses que fueron despojados de su nacionalidad”, escribió Petro en la primera parte del trino.

Posteriormente, el mandatario recalcó que es necesario condenar las violaciones de derechos humanos que comete el régimen Ortega Murillo.

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Cabe señalar que el presidente Petro había evitado opinar en este tema, pues la relación entre su país y nicaragua es tensa, porque el conflicto limítrofe que sostienen por las aguas de San Andrés y Providencia, sin embargo, al ver que 317 nicaragüenses han sido despojados de su nacionalidad de forma arbitraria, decidió sentar su posición.

Los afectados

Dos obispos de la iglesia católica, los monseñores Rolando Álvarez, quien está condenado a 26 años de cárcel, y Silvio Báez, fueron despojados de su nacionalidad, así como los escritores Sergio Ramírez y Gioconda Belli, además de periodistas y opositores, entre los que hay muchos que fueron adeptos al FSLN, partido de Daniel Ortega.

Cabe señalar, que el mundo ha acusado que los mandatarios de América Latina se han hecho ajenos a la causa de Nicaragua, incluso, ninguno ofreció la ciudadanía a las personas que se convirtieron en apátridas, acción que solamente fue tomada por el gobierno de España.

El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) se ha mostrado “gravemente preocupado” por la retirada “arbitraria” de la nacionalidad a más de 300 opositores nicaragüenses y ha advertido de que este tipo de medidas incrementan el riesgo de apatridia.