Ana Margarita Vijil: “La dictadura de Daniel Ortega vive su etapa conclusiva”

La excarcela política y ahora desterrada Ana Margarita Vijil dijo este jueves, en Panorama Nicaragua, que la dictadura de Daniel Ortega vive su etapa conclusiva y que hay que articular todos los esfuerzos de resistencia tanto dentro como fuera del país para presionarlo.

“La dictadura de Daniel Ortega vive su etapa conclusiva, pero nos toca, en efecto, poder fortalecer las redes dentro y fuera del país, que es lo que se ha estado haciendo intuitivamente todos estos años”, señala.

Además, dice que Daniel Ortega no quisiera que hubiera resistencia nacional, “pero sabe que hay resistencia interna desde la gente que llega a una misa a solidarizarse con un padre hasta quien sale en una procesión en Semana Santa. Eso es una resistencia que él no soporta, porque sabe que es peligrosa para él”.

Vijil considera que el gran reto desde el exilio es poder articular la resistencia tanto dentro como fuera de Nicaragua, para fortalecer esas redes y aumentar la presión y las voces de denuncia, para que Daniel Ortega abra esos espacios democráticos.

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“Para comenzar, creo que la unidad más importante es la unidad en acción y creo que esa es la que ha sido clave estos 5 años, para mantener la llama de abril y para no dejar descansar a Daniel Ortega y para que el régimen esté en esta etapa conclusiva”, insiste.

Ella asegura que la unidad es la“que implica que cada nicaragüense, independientemente de qué ideología tenga o qué religión tenés o dónde estás, está clarísimo que es una estrategia para sacar a Daniel Ortega”.

Salida cívica

En cuanto a esa estrategia, dejó claro que será “por la vía cívica que vamos a seguir presionando, pero que no es que vamos a comenzar una guerra”, también dijo que toda voz es importante y que “vos lo podés hacer desde donde estés, yo desde donde estoy y que el enfoque es abrir el espacio democrático en Nicaragua y que es unas elecciones adelantadas, es una vía democrática y que una salida democrática a Daniel Ortega es la clave”.

Ella cree que si se presiona a la dictadura de distintos lados, “esa unidad en acción es la más importante. Ahora por supuesto que la otra es vital también y son todos esos esfuerzos que se han ido haciendo y no es cierto que han caído en saco roto, al contrario, la cárcel nos ha unido mucho más”.

Asegura que en la cárcel es “donde terminas conociendo más el carácter personal y más íntimo de estas personas que tal vez eran tus compañeros políticos del que no conocías mucho más y que tenías muchos recelos, muchas diferencias y en la cárcel te das cuenta de que estamos todos en el mismo lado, tras los barrotes, de que tenemos un pedacito de la verdad que es correcto que él tenga su punto de vista aunque sea de distinto al tuyo, pues  todo eso ayuda también para abonar en una unidad mucho más monolítica que se quisiera ver fuera y creo que nosotros podemos jugar un rol”.