Mónica Baltodano y Enrique Sáenz responden sobre cómo salir de la dictadura en Nicaragua

El economista Enrique Sáenz y la ex diputada Mónica Baltodano, ambos desterradas consideran que la comunidad internacional juega un importante rol en la salida de Nicaragua de la dictadura de Daniel Ortega, más no es determinante.

“Esta dictadura tiene que caer por la vía cívica y pacífica, nadie está pensando en la reproducción de la lucha armada, que fue el instrumento principal de la lucha contra la dictadura de Somoza,  y aunque los camino cívicos como las elecciones libres democráticas y transparentes, por el momento parece cerrado, nosotros tenemos con absoluta convicción de que la vía de la rebelión cívica, que fue la que se produjo en el 2018 y e fue aplastada a fuego y sangre, aún sigue”, dijo Mónica Baltodano.

Baltodano, dijo lo anterior en un conversatorio virtual de la Fundación  Fernando Henrique Cardoso, el Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (CADAL) y la Fundación Puentes para el Desarrollo de Centroamérica, donde participó con el economista Enrique Sáenz. 

“Es decir, cuando se cierran los caminos democráticos como los caminos electorales, la rebelión cívica es una vía también democrática, entonces la apuesta de quienes estamos en el exilio y parte de la oposición mayoritariamente que se encuentra dentro del país, es a la creación de condiciones organizativas, organizaciones de conciencia, organizaciones políticas dentro del país, para reeditar nuevas páginas de rebeldía obviamente que eso requiere de la comunidad internacional”, refrendó Baltodano. 

La exdiputada, ahora en el destierro, considera que la Organización de Estados Americanos sigue siendo un espacio importante. 

“Aunque a finales del año pasado (Ortega salió de la OEA) para nosotros es importante que se cree un grupo de países y Estados que le den seguimiento a la agenda el caso de Nicaragua, pero obviamente que tal y como se presenta la situación a nivel internacional, los alcances pueden ser mucho menores que los que nosotros necesitamos o que los nicaragüenses necesitamos, definitivamente se tiene que crear condiciones de mucha mayor presión tanto nacional como internacional para que las cosas puedan discurrir en un camino muchísimo más eficaz”, dijo Baltodano.

Enrique Sáenz, por su parte, dijo respecto a la Comunidad Internacional, que los diferentes presidentes de Estados Unidos han sido receptivos en el tema de Nicaragua, pero en el caso de Joe Biden ha sido “reactivo”.  

“Tal como se ha demostrado las administraciones norteamericanas se guían por intereses, la percepción de intereses que tienen en Centroamérica y en Nicaragua y básicamente el desafío de los nicaragüenses es que Estados Unidos se mantenga una posición en favor de la democracia, en favor de los Derechos Humanos, en favor de una salida digna para el pueblo nicaragüense”, Sostuvo Sáenz. 

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Según Baltodano hay una separación entre derechos humanos, Relaciones Políticas y Relaciones Económicas.

“Hasta el día de hoy, Enrique (Sáenz) hablaba del 40% de de las exportaciones de Nicaragua van a Estados Unidos, pero el 60% de las importaciones viene de los Estados Unidos hacia Nicaragua y las relaciones económicas también con la Unión Europea de alguna manera se mantienen inalterables. Recientemente nos decían algunos europeos que por qué no hacíamos una lista de las empresas que siguen operando comercialmente con Nicaragua porque se mueven en algunos parlamentos la idea de empezar a introducir condicionalidades relacionadas con el tema de derechos humanos a la hora de establecer las relaciones económicas”, comentó la ex comandante guerrillera.

Agregó “Sostengo que el factor determinante para que podamos abrir el camino de retorno a la democracia va a ser la lucha del propio pueblo nicaragüense”, remarcó Baltodano. 

El economista Enrique Sáenz, dijo que países latinoamericanos, y en particular los centroamericanos, no tienen la democracia asegurada.

“Los países deben tomar una posición sobre la realidad de Nicaragua, la democracia, las elecciones, los derechos humanos, no solo es un acto de solidaridad hispanoamericana, no solo es un acto de principios humanitarios, sino que viene siendo casi un mecanismo de autodefensa”, sostuvo Sáenz.