Dora María Téllez advierte sobre una "gran barrida" en las universidades nicaragüenses
En su editorial semanal, Dora María Téllez, excomandante guerrillera y opositora al régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, advierte una ola masiva de despidos dentro de las universidades públicas en Nicaragua.
Téllez, quien fue excarcelada, desterrada y desnacionalizada por el régimen sandinista, explicó que el gobierno ha iniciado una serie de medidas que atentan directamente contra la autonomía universitaria.
“Ortega anunció que las universidades van a pagar sus servicios públicos, agua, luz, teléfono, electricidad, Internet, todos los servicios públicos, que antes eran gratuitos para las universidades públicas”, dijo la opositora.
En su intervención, Téllez, señaló que esta decisión debería ser gratuita para las universidades públicas, representa un golpe más a la autonomía de estas instituciones educativas. "Con esto, el gobierno comienza la etapa de la 'gran barrida' dentro de las universidades", afirmó Téllez.
Según Dora María, este proceso de "barrida" tiene como antecedente la aprobación de una reforma en diciembre de 2023 que prácticamente desmanteló la Ley de Autonomía Universitaria, vigente desde 1990.
“Así es que los rectores pasaron a ser nombrados por el Consejo Nacional de Universidades, CNU, y este pasó a ser nombrado por el Presidente de la República y pues, el propio Consejo Nacional de Universidades va a nombrar a los directores de área, porque las decanaturas desaparecieron, todos los órganos de la autonomía universitaria, lograda con grandes luchas estudiantiles en los años 60”, añadió Téllez.
"Compactación" de carreras
Como consecuencia de estos recortes presupuestarios, Téllez, advirtió que lo que sigue es una "compactación" de carreras, lo que implica el cierre de facultades y la reducción de la oferta académica. "Hay muchas facultades de Derecho, hay que recortar facultades de Derecho. Hay muchas facultades de Ciencias Sociales, hay que recortar Facultades de Ciencias Sociales", explicó.
Esta reducción afectará tanto a estudiantes como a profesores, quienes podrían ser despedidos en masa, dejando a miles de jóvenes sin opciones educativas en sus áreas de estudio.
El último paso, según Téllez, será exigir que los estudiantes paguen cuotas académicas, algo que actualmente no sucede en las universidades públicas. Este requerimiento, en un país donde la educación ha sido gratuita y accesible, sería un obstáculo más para la juventud nicaragüense, y marcaría el golpe final contra la autonomía universitaria.
En sus declaraciones, Téllez también destacó que, el régimen de Ortega-Murillo continúa desmantelando la autonomía universitaria y los fondos que deberían destinarse a mejorar la calidad educativa, según ella, siguen siendo desviados.
Finalmente, Téllez hizo un llamado a la comunidad internacional y a los nicaragüenses a seguir luchando por la libertad de los 45 presos y presas políticas que actualmente permanecen encarcelados por el régimen.
"Luchemos y sigamos luchando para la libertad de estas personas", concluyó la analista.