Ortega no logra ingreso a BRICS; Monteverde denuncia fracaso de política exterior
En un nuevo revés para el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, Nicaragua quedó fuera del grupo de países asociados al bloque de economías emergentes conocido como BRICS. Este fracaso se materializó durante la XVI cumbre del grupo, celebrada en Kazán, Rusia, del 22 al 24 de octubre.
Monteverde o también llamado el Grupo de Concertación Democrática, divulgó el comunicado oficial sobre la no incorporación, señalan se trata de "otra clara expresión de su errática política exterior."
El dictador Daniel Ortega había manifestado públicamente su deseo de que Nicaragua formara parte del influyente bloque económico, conformado originalmente por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, y que ahora incluye a nuevos miembros como Irán, Egipto, Etiopía y Emiratos Árabes Unidos. Sin embargo, su intento fue bloqueado principalmente debido a las tensas relaciones diplomáticas entre Ortega y el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, quien ejerció su veto para impedir el ingreso de Nicaraguapresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, quien ejerció su veto para impedir el ingreso de Nicaragua.
El comunicado explica que las tensiones entre ambos mandatarios comenzaron en 2023, cuando Ortega rechazó una propuesta de Lula para mediar en la liberación del obispo nicaragüense Rolando Álvarezliberación del obispo nicaragüense Rolando Álvarez, encarcelado por el régimen. "La situación se agravó en agosto de este año con la expulsión del embajador brasileño acreditado en Managua", detalla el texto, subrayando que este deterioro en las relaciones con Brasil fue un factor clave en el fracaso diplomático de Ortega.
A esto se suma la preocupación geopolítica en torno a cómo la incorporación de Nicaragua y Venezuela, país aliado de Ortega, podría afectar las alianzas estratégicas de Brasil en América Latina. Este contexto llevó al presidente Lula a vetar el ingreso de ambos países, evidenciando, según la Concertación Democrática Nicaragüense (CDN), "una vez más el fracaso de la política exterior del régimen; y la vergüenza que provoca a sus propios aliados, que dos de las dictaduras más crueles y carentes de legitimidad del continente americano formen parte de los BRICS."
En representación del régimen, asistieron a la cumbre el canciller Valdrack Jaentschke, el periodista oficialista Erving Vega y la embajadora en Rusia, Alba Azucena Torres. Sorprendentemente, Laureano Ortega Murillo, hijo de los dictadores, canceló a última hora su participación, probablemente anticipando el fracaso diplomático.
El comunicado también señala que, a pesar de los esfuerzos de los BRICS por establecer un sistema de pagos internacionales independiente del dólar estadounidense desde su creación en 2006, estos no han logrado consolidarse como alternativa a las instituciones financieras internacionales.
"Tampoco que su banco de desarrollo alcance niveles similares a los de las Instituciones Financieras Internacionales (IFI) creadas por el sistema de Bretton Woods", destaca el comunicado, poniendo en duda los supuestos beneficios que Nicaragua hubiera obtenido al ingresar al bloque.
A pesar de este fracaso, el régimen de Ortega Murillo parece dispuesto a seguir distanciándose de sus principales socios comerciales, Estados Unidos y la Unión Europea. "Pese a conocer esta realidad, es previsible que los Ortega Murillo continúen pretendiendo distanciarse de Estados Unidos, que es su principal socio comercial y país de origen de las remesas, y de la Unión Europea (UE), su tercer socio comercial e importante fuente de financiamiento", concluye el comunicado.
Este revés diplomático refuerza la percepción de aislamiento del régimen nicaragüense en el panorama internacional y evidencia la debilidad de su política exterior en la búsqueda de nuevos aliados estratégicos.