Lula veta ingreso de Nicaragua y Venezuela a los BRICS, Ortega queda humillado
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, vetó el ingreso de los regímenes de Daniel Ortega (Nicaragua) y Nicolás Maduro (Venezuela) al bloque BRICS. Según el medio brasileño TV Globo, el gobierno de Brasil ejerció presión política para que ambos países no fueran incluidos en la lista de posibles nuevos miembros.
En abril de este año, el régimen sandinista solicitó formalmente ingresar a este grupoel régimen sandinista solicitó formalmente ingresar a este grupo, expresando su deseo de "fortalecer las relaciones de intercambio y también políticas".
Este martes, se informó que Venezuela y Nicaragua quedaron fuera de la lista de posibles países socios del BRICS. Aunque no hubo un veto formal, trascendió que Brasil no quería a estos dos países en el bloque.
Los BRICS son un grupo de economías emergentes compuesto originalmente por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica. A principios de este año, Egipto, Etiopía, Irán y los Emiratos Árabes Unidos se sumaron al grupo.
Rechazo al ingreso: una "humillación total" para Ortega
El exembajador de Nicaragua ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Arturo McFields, calificó el rechazo como una "humillación total" al régimen de Ortega y Murillo.
“No lograron integrarse a los BRICS, ni siquiera lograron ser considerados en algún momento. Brasil, como miembro fundador del grupo, les dijo no. Es una dulce venganza de Lula tras las humillaciones de la dictadura de Nicaragua y los insultos emitidos principalmente por Ortega”, afirmó McFields.
El exdiplomático señaló que Ortega, acostumbrado a insultar y humillar, fue respondido de manera sutil y contundente por Lula, quedando fuera de los BRICS.
“Regresan humillados, con las manos vacías y el rabo entre las piernas. No hicieron nada en la Cumbre, solo fueron ignorados y no considerados dentro de los grandes actores de la escena mundial como India, Brasil, Rusia y China”, agregó McFields.
Estrategia pragmática de Brasil
Por su parte, el analista político Félix Maradiaga expresó a 100% Noticias que la presión ejercida por Brasil debe entenderse como parte de una estrategia más amplia y pragmática para fortalecer la legitimidad y el peso económico del BRICS, y no como una revancha personal de Lula da Silva.
Maradiaga destacó que esta decisión refleja dos visiones diferentes dentro del BRICS: una ideológica y geopolítica, liderada por China y Rusia, que busca contrarrestar la hegemonía de Estados Unidos, y otra más pragmática, representada por Brasil, India y Sudáfrica, que desean crear un bloque alternativo a las instituciones financieras occidentales, sin caer en un juego polarizador.
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“Al bloquear el ingreso de Nicaragua y Venezuela, Brasil refuerza su interés en consolidar un BRICS que no esté vinculado a regímenes cuestionados por su falta de democracia y violaciones a los derechos humanos”, explicó Maradiaga.
Falta de respaldo internacional
Maradiaga también subrayó que la falta de respaldo de Rusia y China para incluir a Nicaragua es un signo del creciente aislamiento de la dictadura de Ortega, incluso entre sus antiguos aliados.
“La exclusión de Nicaragua simboliza el abandono de la dictadura de Ortega en la arena internacional, y la poca seriedad con la que se perciben sus intentos de formar parte de este tipo de organizaciones revela cuán aislado está el régimen sandinista”, concluyó el analista.