Monitoreo Azul y Blanco reporta 21 detenciones arbitrarias en los últimos cuatro días
Desde el pasado 22 de noviembre, Nicaragua ha sido escenario de un incremento alarmante de detenciones arbitrarias, con al menos 21 personas arrestadas en tan solo cuatro días, según reporta el Monitoreo Azul y Blanco (MAB).
Esta organización, dedicada a registrar las violaciones a los derechos humanos en el país, ha recibido múltiples denuncias de arrestos en al menos 10 departamentos, aunque advierte que la cifra podría ser mayor, ya que existen varios casos aún por verificar.
En su comunicado, el MAB resalta que "estas acciones se dan tras las reformas inconstitucionales impulsadas por el régimen de Daniel Ortega, que refuerzan su control represivo". Las reformas, que han sido ampliamente criticadas por la comunidad internacional, parecen estar intensificando las tácticas de represión del gobierno, cuyas fuerzas de seguridad se enfrentan a crecientes denuncias por violaciones a los derechos humanos.
El Monitoreo Azul y Blanco también denuncia el trato inhumano hacia los familiares de las personas detenidas. "Las autoridades tratan con saña a los familiares, negándoles información sobre el paradero de las personas detenidas y desapareciéndolas por días", indica el comunicado.
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Esta falta de transparencia y el ocultamiento de la información contribuyen a la desinformación, creando un clima de angustia y desesperación entre los ciudadanos.
Particularmente preocupante es el hecho de que entre los detenidos se encuentran familias completas, incluyendo "niños menores de edad y 10 adultos mayores en estado vulnerable, cuyos paraderos también son desconocidos". Esto subraya la grave violación a los derechos humanos y la completa indiferencia del régimen hacia la integridad de sus ciudadanos más vulnerables.
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El MAB advirtió en su comunicado, que este es solo un "registro ciudadano que no refleja la totalidad de la violencia del Estado", ya que debido al clima de represión y terror, muchas víctimas y sus familias no logran denunciar las violaciones a sus derechos. Como resultado, las cifras del MAB contienen un subregistro de las detenciones y abusos ocurridos en Nicaragua.