Monseñor Báez: "Jesús no quiere una iglesia callada", quiere que digan la verdad con valentía
Monseñor Silvio José Báez, obispo auxiliar de Managua, dijo este domingo que “en el momento de la persecución, Jesús no quiere una Iglesia callada, sino una Iglesia llena de sabiduría, que sepa decir la palabra de la verdad con mansedumbre, pero con claridad y valentía”, en un momento en el que la iglesia católica en Nicaragua está siendo perseguida por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Asimismo, monseñor Báez predicó que la palabra de la iglesia inspirada en Jesús es serena, clara, fuerte y valiente, por lo que “es más fuerte que los discursos de odio, las amenazas violentas y las acciones criminales de sus adversarios”.
Desde el púlpito, también refirió que el gran reto de la Iglesia en el momento de la persecución es dejarse inspirar por Jesús, “quien nos asegura que nos dará palabras llenas de sabiduría y de sensatez, pero tan claras y contundentes que los adversarios no podrán contra ellas”. Además, insta a no temer, porque la iglesia está protegida por Jesús.
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“Jesús asegura a la Iglesia su permanente protección. A la Iglesia le acompaña siempre la amorosa presencia de Jesús, quien cuida de nuestra vida, hasta en los detalles más pequeños e insignificantes, como los cabellos de la cabeza. Jesús está con nosotros. Su presencia se manifestará siempre fiel y vigorosa, para defender a su Iglesia frente a los lobos feroces que quieren intimidarla, doblegarla y someterla a sus intereses malignos”, insistió.
Llama a no tener miedo
El prelado llama a no tener miedo, porque “el miedo hace mal, nos encierra en nosotros mismos, nos impide ser coherentes, hace que distorsionemos la realidad y puede llevarnos a vender nuestra conciencia y, en el peor de los casos, podemos acabar negando a Jesús y renegando de la Iglesia”.
Refiere que la perseverancia es la clave para vivir la fe en la historia, porque significa “aguante, capacidad para mantenernos firmes, paciencia fuerte y activa. La perseverancia no es una cualidad de los hombres fuertes y aguerridos, sino la actitud serena de quien confía en el Dios que alienta y guía la historia con ternura y amor compasivos”.
“A pesar de los sufrimientos que padece la humanidad y las injusticias que ensombrecen la vida social, Dios está actuando cada día en favor nuestro. Su amor es perseverante. Seamos nosotros también perseverantes para confiar en él y poner en él nuestra esperanza”, enfatiza monseñor Báez.
Además, monseñor invita a estar atentos y no dejarse engañar, porque muchos querrán usurpar su nombre y se presentarán como mesías y salvadores.
“No debemos dejarnos arrastrar por personas, instituciones, modas o ideologías que nos aparten de Jesús y del camino del Evangelio. Nosotros solo tenemos un Maestro a quien seguir y solo su palabra debe guiar e iluminar nuestra vida”, insistió Báez en su homilía dominical.