“La iglesia es la única institución que no han podido ni podrán destruir” los Ortega Murillo, dice obispo hondureño
Monseñor José Antonio Canales, del Secretariado del Episcopado de América Central (Sedac), y obispo de Danlí, en Honduras, es un pastor que ve de frente y habla sin tapujos sobre la situación de la iglesia católica en Nicaragua, pues asegura que la dictadura no ha podido ni podrá destruirla, pese a sus ataques continuos.
Monseñor Canales realiza su labor pastoral a tan solo 35 minutos de la frontera con Honduras y es uno de los pocos obispos que ha mantenido una voz viva y constante a favor de la liberación de monseñor Rolando José Álvarez, tal como lo expresó en el programa Panorama Nicaragua, esta tarde.
“Porque la iglesia es la única institución a la que no han podido destruir y no van a poder destruir, pero en su ignorancia continúan viendo de qué manera golpean a la iglesia, porque esa es la tarea que tienen, golpear a la iglesia, debilitarla y en su mente pues un día decir que desapareció”, sostiene.
Asimismo, señaló que la situación que vive Nicaragua es épica, pues es el primer país en América Latina que expulsa a un Nuncio Apostólico y que rompe relaciones diplomáticas con el Vaticano, “aunque dicen que es suspensión, rompieron relaciones”.
“Es un país donde ocurren estos fenómenos inéditos de relación con la iglesia, los atropellos porque se opone a sus proyectos totalitarios, a sus proyectos de humillar a todo un pueblo, a todo un país. Han cancelado a miles de ONG, la última la Cruz Roja, universidades etcétera, y con la iglesia no hallan qué hacer y por eso están dando este tipo de manotazos, este tipo de actuaciones hostiles que no son nuevas”, prosiguió el obispo de Danlí.
Sobre la situación de monseñor Álvarez
Monseñor Canales hizo observaciones acerca del alarde que realizó la dictadura cuando presentó a monseñor Rolando Álvarez en visita familiar, lo cual cree fue para calmar la presión internacional.
“Yo me pregunto aquella presentación tan publicitada que hicieron de monseñor Rolando Álvarez, qué objetivo tenía. Si era una forma de calmar los reclamos internacionales que hay sobre su persona”, enfatizó.
Además, hizo hincapié en que el obispo de la Diócesis de Matagalpa representa a los nicaragüenses que tienen otra manera de ver Nicaragua y por lo tanto tumbó el proyecto que tenía el régimen cuando se dio la liberación de los 222 y él no quiso abandonar el país.
“Monseñor Álvarez no quiere estar preso, quiere estar libre, hoy mismo, pero dentro de Nicaragua. Él no aceptó caer en el juego de la tiranía y conociendo a esta gente cómo es de vengativa no sabemos qué tipo de vida le están dando y por eso nosotros estamos preguntando”, manifestó.
Asimismo, monseñor Canales dijo que estarían tranquilos si supieran que la familia o algún miembro de la iglesia está viendo a monseñor Álvarez, pero señala que hay un silencio que preocupa a todo el mundo, no solamente en Nicaragua, porque la mirada está en el país sobre todo en el obispo.
“Estamos pendientes de monseñor Rolando Álvarez y de todos los nicaragüenses que están sufriendo, que son el 99% de la población, y sobre todo del sufrimiento que está teniendo la iglesia. Nuestros ojos están sobre Nicaragua, aunque ellos quisieran que no, pero están viendo hacia Nicaragua”, resaltó.
Finalmente, señaló que en Honduras muchas voces se han levantado para criticar directamente al gobierno cuando en foros internacionales se abstienen de votar para condenar lo que está pasando en Nicaragua.