Bajada de Santo Domingo con presencia de alcaldesa sandinista de Managua, tras acuerdos con iglesia
Esta mañana, la venerada imagen de Santo Domingo de Guzmán, el patrono de los católicos de Managua, fue bajada de su trono, ubicado en el altar mayor en la Iglesia de Las Sierritas de Managua.
En la misa, estuvieron presentes Reyna Rueda, alcaldesa de Managua y “mayordoma impuesta”, por la dictadura, quien no tuvo la oportunidad de bailar al patrono.
La alcaldesa estuvo acompañada de Enrique Armas, el vicealcalde de la capital, quien al momento que la imagen fue descendida, solo se acercó para tomarse fotos, según se pudo apreciar en las transmisiones en vivo de la Iglesia.
Rosario Murillo, vocera de la dictadura y quien coordina a los medios oficialistas, levantó el veto al Cardenal y hasta autorizó a Reyna Rueda a que destacara el mensaje de paz del prelado durante la misa de la bajada.
"Nos sentimos honrados de escuchar la palabra de Dios en unión familiar donde todos los promesantes acompañados con el Cardenal Leopoldo Brenes que hizo un llamado a la paz, a la hermandad y a celebrar estas fiestas de Managua en paz y unidad familiar", dijo la alcaldesa Reyna Rueda a medios oficialistas.
En el interior de la sacristía, el Cardenal saludó a Reyna Rueda y a Enrique Armas. A Brenes se le vio muy contento y hasta extendió la mano a las autoridades edilicias.
Rueda aseguró que están trabajando en coordinación con otras instituciones para garantizar el orden durante estas festividades que han sido cuestionadas por muchos católicos porque el régimen las ha autorizado tras una “capacidad de dialogar” con la Iglesia.
"Estamos trabajando junto con la Policía Nacional, la Cruz Blanca y ha sido un éxito todos los años. En esta misa hemos escuchado la palabra de Dios, el llamado a la paz, a celebrar en armonía y con mucha devoción", agregó Reya Rueda.
Procesión gracias a “capacidad de dialogar”
La semana pasada, el párroco de la iglesia de Santo Domingo en Las Sierritas de Managua, Boanerges Carballo, anunció por medio de un video que la tradicional procesión de Santo Domingo de Guzmán, el 1 y 10 de agosto, "será posible gracias a la capacidad de conversar".
Las de Santo Domingo serán una excepción, debido a que las autoridades han prohibido a la Iglesia católica de Nicaragua las procesiones en las calles.
"Nuestra festividades patronales serán posibles gracias a la capacidad de conversar, de orar y trabajar juntos, por ello con alegría nos preparamos para que la imagen de Santo Domingo de Guzmán visite la ciudad capital y se encuentre con sus devotos", sostuvo el sacerdote Carballo.
"Manifestamos nuestra gratitud a todos los que encontrándonos y caminando juntos haremos posible estos días de devoción, con alegría y fraternidad", agregó.
Las fiestas de Santo Domingo de Guzmán son consideradas populares y no patronales, ya que el patrono de Managua es Santiago, que a pesar de su estatus es poco reverenciado en la capital nicaragüense.
Desde 1886, Santo Domingo atrae a multitudes durante los diez días que permanece en Managua.
Las relaciones del Gobierno de Ortega y la Iglesia católica viven ahora momentos de gran tensión, marcadas por la expulsión y encarcelamiento de sacerdotes, la prohibición de actividades religiosas y la suspensión de sus relaciones diplomáticas.
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El papa Francisco tildó de "dictadura grosera" al Gobierno sandinista en una entrevista con Infobae, señalando "un desequilibrio de la persona que dirige" el país centroamericano.