Policía denuncia "fraude emocional y económico" en caso de niña secuestrada en hospital de Managua
A través de una comunicado, la policía en Nicaragua, reveló un intento de falsificación de "embarazo y alumbramiento" en el caso de la niña Sofía Nazareth Ventura, de 4 meses, secuestrada del hospital materno infantil "La Mascota en Managua". La menor fue localizada horas después de haber sido sustraída del hospital y sus padres estaban retenidos.
Tras interrogatorios y otras entrevistas realizadas, la policía informó que "hasta el momento ha concluido que se ha logrado frenar una actividad manipuladora que involucra a personas y parejas que perseguían sus propios fines".
Agregan en el comunicado "que con la Niñita se intentaba engañar y consolidar relaciones de pareja, que aparentemente no eran correspondidas por una de las partes".
"Además se buscaba recibir recursos, falsificando embarazo y alumbramiento, en el intento de exigir cobertura de gastos relacionados con la Niña".
En el informe policial se limitaron a describir el fondo de los hechos, pero sin determinar o precisar el nombre de las personas involucradas para "consolidar las relaciones de parejas" y del engaño que se intentaba ejecutar por un amor no correspondido entre las parte involucradas.
El informe indica que continúan ampliando el caso con entrevistas y llevar "ante las Autoridades Judiciales a las y los responsables de este caso típico de fraude emocional y económico".
"La Niñita permanece bajo los cuidados del Ministerio de la Familia".
Día del secuestro
El secuestro ocurrió el 17 de diciembre, cuando Francesca Ventura, madre de la bebé, recibió una llamada de un desconocido que la citó al hospital bajo el pretexto de un beneficio médico.
Francesca llegó al hospital acompañada de su abuela y su hija. Allí, fue abordada por una mujer vestida de doctora, quien le entregó dos pastillas que la dejaron inconsciente. Al recuperar el conocimiento, la bebé ya no estaba con ella.
El secuestro ocurrió en el predio del hospital, donde supuestamente solo Francesca ingresó y una una mujer morena, cabello crespo, de estatura baja y de entre 25 y 30 años le salió al paso y le aseguró que para ingresar a la sala médica debía ingerir agua con dos pastillas para higienizarla mientras la mujer ingresó con la menor y la joven madre la perdió de vista, pero esta recobró la conciencia casi dos horas después.