Enrique Sáenz dice que los falsos proyectos anunciados por Daniel Ortega son "delirios de su fase demencial”

El Canal Interoceánico, la generadora Eléctrica Tumarín, un satélite, un puerto de aguas profundas en el Caribe y hasta el algodón en colores, son algunos de los falsos proyectos vendidos al pueblo de Nicaragua que surgen de la fase más “demencial” de Daniel Ortega, asegura Enrique Sáenz.

El economista, recordó el proyecto de la represa Tumarín "1.200 millones de dólares era el costo que iba a producir esa represa, íbamos a inundar de energía a Centroamérica. Era en contubernio con mafiosos o inversionistas brasileños, una de esas corruptela de la época del (presidente) Lula con costos inflados para la empresa brasileña Queiroz Galvao”, dijo Sáenz. 

Sobre el proyecto de una “mega” refinería llamada "El Complejo Industrial El Supremo Sueño de Bolívar", el experto dijo que el proyectó quedó reducido a tanques de almacenamiento de combustible.

“Se suponía que aquí iban a venir millonadas de barriles de petróleo a ser refinados y se iba a inundar a Centroamérica y a países de la Cuenca del Pacífico de combustible, pero todo el sueño quedó en una pesadilla con unos tanques que supuestamente valen 500 millones de dólares, utilizados para el almacenamiento de combustible”, explicó.

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Otro de los delirios de Ortega fue que Nicaragua sería el primer país centroamericano con un satélite en órbita. “Todavía estamos esperando el satélite chino, salvo que haya sido aquel meteorito que cayó mágicamente que ni siquiera los sensores de la NASA lo captaron”, dijo sarcásticamente el experto.

Según Sáez, hay proyectos que aunque sí existen no alcanzaron las máximas expectativas, por ejemplo, el Banco Produzcamos, se inauguró en el 2007 con bombos y platillos para financiar pequeños, medianos, productores y empresarios, lo cual fomentaría el empleo y la transformación tecnológica.

“El Banco Produzcamos existe desde hace más de 15 años y apuradamente tiene el 2% de la cartera de créditos del país, ahí están escondidos. Allí seguramente los funcionarios sancionados tienen sus fondos en fideicomisos, estos no se reportan ni como cartera ni como depósitos”, especuló Sáenz.

El proyecto Cota 100

El 20 de mayo de 2016 durante la Asamblea Sandinista Nacional, Daniel Ortega recordó que en el período del 79 al 90 se trabajó el Proyecto de la Cota 100, un proyecto de irrigación a gran escala. En ese momento, Ortega dijo que proyecto de la Cota 100 sería un proyecto “que tiene que encarnar el Programa de Gobierno del Frente Sandinista para el período 2017 al año 2022”. Sin embargo hasta ahora no se ha visto nada sobre este proyecto. 

"El dictador Ortega dijo que el caudal del lago de Granada drena al Río San Juan, iban a regresar el río San Juan para subir el caudal, colocarlo encima del lago de Managua y después por un juego de canales trasladar el agua del lago de Granada al lago de Managua. Por arte de magia el lago de Managua se iba a descontaminar y desde allí van irrigar la planicie el Pacífico, facilitando tres cosechas al año, íbamos a derrotar al cambio climático y por supuesto íbamos inundar de alimentos y productos agrícolas a Centroamérica, América Latina y a otros países”, dijo Sáenz. 

El economista no dejó por fuera El Puerto de Aguas Profundas de Bluefields, Caribe Sur, el primero de aguas profundas del país y el primero de gran magnitud en el Caribe, el cual supuestamente ayudaría a disminuir la dependencia de Nicaragua de los puertos extranjeros de Cortés (Honduras) y Limón (Costa Rica), en el sector Atlántico.

"Empezó a hablar de esto desde la década de los 80s, y ese proyecto  duerme el sueño de los justos”, indicó Sáenz. 

Así llegó también la iniciativa del algodón en colores, el que supuestamente con los nuevos adelantos científicos, con las técnicas de biotecnología, el algodón iba a nacer en colores.

“Ya en colores iba a ir directamente a la hilanderías porque ya estaban las inversiones para la fábrica y hubo quienes agarraron la vara. Varios leoneses que habían sido algodoneros o hijos de algodoneros de otro tiempo, empezaron con el cultivo del algodón, pero no fue más que un mal sueño”, dijo Sáenz a través de su programa Vamos al Punto.

Sáenz no concluyó sin antes recordar el megaproyecto insignia del régimen por el cual siempre serán recordados. El 21 de febrero de 2012, Daniel Ortega anunció por primera vez públicamente que iba a reanudar la idea histórica del canal. El 7 de junio de 2013, el gobierno entregó a HKND Group la concesión del canal y el día 13 del mismo mes la Asamblea aprobó su construcción por parte de la firma china.

"El vergonzoso Canal Interoceánico, que entregó parte del país en una hipoteca de 100 años con un especulador chino, no se construyeron las esclusas, que en los puertos iban a desembarcar toda la maquinaria y lo que está ahí es una trocha donde en verano es un polvazal, en invierno un lodazal y una vacas que pastan esperando que lleguen grandes buques cargados de containers de un océano a otro”, dijo Saénz.

Último delirio, la energía atómica

En sus recientes discursos Ortega habló de la Energía Atómica, lo que según el economista es una maniobra “diversionista”.

“Su delirio de moda es la bomba atómica, la energía atómica y bueno, lo ha venido repitiendo en su último discursos que no tenemos bomba atómica, que la bomba atómica va, que la bomba atómica viene, pues bueno, emitió un decreto creando la Comisión Nicaragüense de Energía Atómica”, señaló el experto.

Agrega “Tendríamos que preguntarnos cuántos físicos nucleares hay en Nicaragua, ninguno, si hasta la UNAM cerró la carrera de Ciencias Físicas hace años. Cómo es que viene a hablar de Energía Atómica si no tenemos ni infraestructura humana”, develó.

Sostiene Ortega intenta llamar la atención del presidente ruso Vladimir Putín. “Lo que está es enseñándole la pantorrilla a Putin, diciéndole que está listo para que vengan a instalar algún tipo de iniciativa de carácter nuclear, que le permita aparecer como gran líder mundial y como presidente de una gran potencia mundial con una potencia nuclear en Centroamérica y en América Latina, disparates, delirio de una mente que ya entró en una etapa demencial”, concluyó Sáenz.