Nuevo gobierno en Venezuela cobraría dinero que regaló Chávez a Daniel Ortega, dice Eliseo Núñez

Aunque todas las señales indican un claro y contundente triunfo de la oposición venezolana contra el dictador Nicolás Maduro este próximo domingo 28 de julio, eso no mantiene “nerviosa” a la dictadura sandinista en Nicaragua, puesto que ya no reciben beneficios económicos de este país sudamericano, tal y como lo sostiene el analista político y exiliado nicaragüense Eliseo Núñez Hernández en entrevista a 100% Noticias.

Núñez, asegura que una derrota de la dictadura en Venezuela, le genere presión al régimen en Nicaragua. 

“No los veo nerviosos (a los Ortega Murillo) porque están en otra sintonía. El país (Nicaragua) está mucho más cerrado que Venezuela, porque ahí se pueden hacer campañas y organizar partidos, en Nicaragua no. Y ellos ahorita están en la construcción de la dinastía. No están en otra cosa diferente”, explicó Núñez.

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Hizo hincapié que ante un triunfo de la oposición venezolana, ya instalado en el nuevo gobierno, éste le cobraría todo el dinero que le tiene adeudado a Venezuela. 

Considera que pueden ocurrir dos escenarios: “O Nicaragua deja de ser importante porque ya resolviste Venezuela, o todo lo que estaba distraído con Venezuela se concentra ahora en tratar de resolver el tema de Nicaragua”, añadió.

Comentó que en el caso de que haya una transición negociada en Venezuela, en que se le de algún beneficio de impunidad a los chavistas, esto no se traduce a que ese beneficio también sería para los gobiernos extranjeros que se beneficiaron del dinero del pueblo de Venezuela.

“Es decir si vos estas asumiendo el costo político de perdonar a un venezolano que se robó dinero de (la petrolera) PDVSA, ¿Querrás asumir el costo político de perdonar al extranjero que robó junto con él?, no creo”, sentenció.

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Con una derrota del chavismo, para el analista, no significa que el orteguismo no tenga algunos inconvenientes en su marcha hacia el continuismo, pues considera que podría haber algunas inconformidades dentro del partido de gobierno que van a rechazar el modelo dinástico. 

Desde que Daniel Ortega retomó el poder en Nicaragua, su mayor benefactor fue el dictador Hugo Chávez, luego en su sucesión, fue Nicolás Maduro, a través de sangrar las arcas de la petrolera PDVSA generando una deuda de alrededor de cinco mil millones de dólares, suma que podría ser mayor, hasta que un nuevo gobierno haga una real auditoria de la deuda que tiene Nicaragua con este país sudamericano.