“Vivo con la angustia de no poder volver a verlo”, dice en la SIP Renata Holmann, hija de Juan Lorenzo Holmann

Renata Holmann, hija del preso político Juan Lorenzo Holmann Chamorro, gerente general del diario La Prensa, denunció en la 78 Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), realizada en Madrid, España, las condiciones inhumanas en que se encuentra su padre en las celdas del Chipote.

“Vivo con la angustia de no poder volver a verlo, de que muera confinado en las celdas de El Chipote a pesar de su inocencia”, expresó Renata Holmann durante su comparecencia en la 78 Asamblea General de la SIP.

La hija del preso político también dijo temer por la seguridad del resto de sus familiares, quienes en Nicaragua sufren acoso de parte de fanáticos del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo.

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“También temo por la seguridad del resto de mi familia que sigue en Nicaragua, un temor que se ha agravado ahora que el régimen se está ensañando en contra de familiares de prisioneros y de opositores que se han ido al exilio. Temo no poder volver nunca a mi país Nicaragua, a mi casa”, afirmó Renata durante la sesión de la Comisión de Libertad de Prensa e Información.

El preso político Juan Lorenzo Holmann Chamorro, es vicepresidente regional de la Sociedad Interamericana de Prensa en Nicaragua.

Electo bajo prisión

Carlos Canahuati, presidente de la SIP, informó que este viernes 28 de octubre, el gerente general de La Prensa fue “electo nuevamente como director de la Junta Directiva de la SIP, ha sido el más votado de toda la historia, y es la primera persona electa bajo prisión”, detalló.

Durante su intervención, Renata Holmann recordó la última vez que habló con su papá, el 12 de agosto de 2021, cuando La Prensa informó que dejaría de circular por la falta de materia prima como consecuencia de las asfixias impuesta por el régimen orteguista de Daniel Ortega a través de la Dirección General de Aduanas (DGA).

Un día después de la denuncia realizada por el medio de comunicación más antiguo de Nicaragua, agentes policiales en conjunto con personal de la Dirección General de Aduanas ejecutaron un allanamiento a las instalaciones del diario.

La madrugada del 14 de agosto, Juan Lorenzo Holmann Chamorro fue arrestado bajo engaños y llevado a las celdas del Chipote, en Managua, en donde ha sido sometido a torturas sicológicas y tratos degradantes.

“Los derechos de mi papá han sido violados continuamente. Desde finales de agosto, hace ya más de 60 días, no hemos sabido nada de él, ni de su estado de salud, el cual se ha visto afectado por las condiciones inhumanas de las celdas en que lo mantienen en espacios pequeños de dos por dos metros; celdas selladas con moho en las paredes ante la falta de ventilación y de luz; mala alimentación; y lo más alarmante una falta de atención médica oportuna y especializada”, expresó Renata Holmann.

También denunció el delicado estado de salud en el que se encuentra su padre, quien ha sido privado del derecho de recibir atención médica especializada.

“Tres meses antes de su secuestro, había regresado al país después de una complicada operación de corazón, de la cual apenas se estaba recuperando. Además es hipertenso, padece de la próstata, ha sido operado en ambos ojos por desprendimiento de retina y se le descubrió un problema severo en la aorta que debería ser constantemente monitoreado. En El Chipote, ha desarrollado nuevos padecimientos debido a las condiciones carcelarias, como dificultades para caminar, lo que asumimos se debe a una hernia abdominal; una mancha negra en el ojo derecho, hongos en las manos y pies, y a veces dificultad para respirar”, puntualizó la hija del preso político.

Renata Holmann también relató la dura realidad que vive su padre, quien fue exhibido a mediados de agosto en medios oficialistas cuando fue llevado a los Juzgados de Managua a “audiencia informativa”.

“Cuando los medios oficialistas circularon fotos y videos de mi padre a finales de agosto, apenas y lo pude reconocer. Lo vi frágil y convaleciente, delgado, dejando en evidencia el maltrato al que está sometido”, señaló.

Agregó que “mi papá sigue firme, inquebrantable, con fe en Dios, fiel a sus valores y a su compromiso con la libertad de expresión y la democracia en Nicaragua”.

“Todos los días, me duele el corazón, por mi papá y por los más de 209 presos políticos que están secuestrados. Comparto el dolor de sus familias, y el dolor de Nicaragua entera, porque los nicaragüenses nos encontramos también en una inmensa cárcel, sin tener derecho a opinar y expresarnos libremente”, continuó.

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Renata finalizó diciendo que “los familiares también vivimos en estado de tortura permanente al ver el deterioro de la salud de las personas presas políticas y ser testigos de lo que parece ser una condena a muerte en cámara lenta”.